El pasado martes la niña Ayshané Vázquez Coreano, recibió la noticia de que comenzaría su primera terapia para recuperar la movilidad perdida en sus manos y brazos, a causa de una explosión de gas ocurrida en su casa de Naranjito.
“Es cool”, esta simple expresión de Ayshané, fue música para los oídos de su padre Félix Vázquez Rodríguez y de los doctores Nelson Colón Ramos y Merlýn López, quienes en un noble gesto de bondad y caridad comenzaron a ofrecerle a la niña de ocho años las terapias físicas necesarias para que recupere la movilidad en sus manos y brazos.
Ayshané, su hermano Jéiren y su madre Tammy Liz sufrieron quemaduras y lesiones severas al sobrevivir a una explosión de gas ocurrida el pasado mes de noviembre en la casa donde vivían en Naranjito. De los tres, Ayshané sufrió las quemaduras y lesiones más graves, de ahí la urgente necesidad de que iniciara cuanto antes unas terapias especializadas para sus manos y brazos.
¿Cómo le fue a Ayshané en su primer día de terapias? Según los doctores del Centro de Terapias de Mano MRN, la pequeña mostró una motivación contagiosa y una gran disposición a dejarse ayudar.
Será una carrera a larga distancia, pero los doctores están confiados en que Ayshané irá progresando poco a poco, y que responderá bien a las terapias.
En resumen, fue un día muy positivo en la vida de Ayshané, que tiene un imán secreto para pegarse al corazón de quien la conoce, y una habilidad para cautivar con su vivacidad.