A sus 51 años de edad y poco más de tres décadas dedicado a la aviación comercial en las principales aerolíneas de Estados Unidos, el capitán puertorriqueño Yamill Geigel tuvo esta semana una cita con la historia.
Este destacado aviador boricua logró el sueño que pocos padres pueden alcanzar: tener a su lado a su propio hijo como copiloto. Se trata de Yamill Geigel, hijo, también nacido en Puerto Rico quien con tan solo 23 años enfrenta a diario la responsabilidad y también la pasión por volar que vio desde pequeño en su progenitor.
"Uno tiene que darle las oportunidades a ellos para que ellos decidan... Inicialmente yo no quería que el fuera piloto, pero le di todas las opciones y el experimentó en lo que era volar hasta que él mismo tomó esa decisión, y yo espero que los padres le den las oportunidades a los hijos", nos dijo el capitán Geigel.
Ambos pilotaron un avión de la aerolínea Spirit desde la ciudad de Boston, Massachussetts, hacia Puerto Rico para transportar a más de 200 pasajeros. La historia comenzó a transformarse desde el primer momento cuando el capitán Geigel anunció a sus pasajeros que el primer oficial del vuelo, osea su copiloto, era nada mas y nada menos que su propio hijo.
"Les habla el capitán Geigel. Estaré asistido esta noche por mi hijo y primer oficial Yamill Geigel, Jr. en nuestro vuelo de 3 horas 25 minutos", anunció con orgullo el capitán Geigel a los más de 200 pasajeros del vuelo a través del altavoz del avión.
Para Yamill hijo resulta un honor y un gran logro poder volar hacia Puerto Rico junto a su padre. Comenzó en la aviació a los 15 años y demostró que lo que se hereda no se hurta cuando en tan solo siete años ha llegado a la posición de primer oficial, algo pocas veces visto.
"Se siente increíble tener la oportunidad de trabajar con mi papá, que él era mi inspiración para entrar a la aviación y volar, y ahora nueve años después estoy aquí trabajando con él, él es mi capitán", expresó Geigel, hijo.
Pero la celebración comenzó desde antes de salir el vuelo hacia la Isla del Encanto. Ambos pilotos padre e hijo fueron felicitados por otros capitanes y primeros oficiales de otras aerolíneas al enterarse del histórico vuelo.
El vuelo a la isla fue sereno, aunque hubo par de turbulencias, los pasajeros sabiamos que íbamos en buenas manos . De hecho, el vuelo llegó a Puerto Rico varios minutos antes de lo pautado. ¿Qué significa para ambos este momento tan importante de sus vidas?
"Increíble en muchos aspectos. Primero el tener la oportunidad de que mi hijo, los dos nacidos aquí, volar para una aerolínea extranjera americana y tener la oportunidad de volar juntos y poder venir a San Juan. El significado es increíble, no puedo describirlo", afirmó el capitán Geigel.
A nuestra llegada a Puerto Rico, padre e hijo fueron celebrados y recibidos por compañero de Spirit y de otra aerolíneas que festejaron con bizcocho este hito de la historia de la aviación. Junto al bizcocho, un modelo a escala del avión que ambos volaron hasta la isla que les vio nacer y que hoy aplaude y destaca su gran gesta. ¡Felicitaciones para ambos y que siempre naveguen en cielos azules!