Un juez federal y la Corte Suprema de Nueva York pusieron en pausa la vacunación obligatoria contra el COVID-19 para trabajadores de hospitales y personal de educación.
El mandato del estado y la ciudad establecía que estos profesionales debían tener al menos una dosis de la inyección antes de finalizar el mes de septiembre para seguir trabajando, y que ya no podían optar por la otra alternativa de hacerse la prueba.
La decisión judicial surge luego de que grupos de representantes laborales alegaran que se estaba violentado sus derechos constitucionales.
Ante esta situacion, el estado ha dicho que la gobernadora Hockul está haciendo todo en su poder para proteger a los neoyorquinos y esto incluye incrementar la vacunación, dandole prioridad a los trabajadores de salud.
Por su parte, el alcalde dijo que la decisión judicial es una acción temporal hasta que pueda irse a la corte. Añadió que están confiados en su posición legal y continúan preparándose para que todos los profesores están vacunados el 27 de septiembre.
Los demandados tienen hasta el 22 de septiembre para responder a la Corte. Si no llegan a un acuerdo, se llevará una audiencia el 28 de septiembre.