"Que me lo devuelvan para estar tranquila", esa es la petición que Justinita Butters Torres le hace al mar.
El menor de sus hijos, Harold Carrión Butters, de 23 años, luego de que este desapareciera en medio de un compartir en la playa Poza del Obispo en Arecibo.
La mujer permanece en la playa y con binoculares en mano observando la inmensidad del mar en busca de una pista de Harold, mientras se cumplen casi 24 horas de la desaparición del menor de sus hijos. Según sus familiares, el joven tenía programada para este miércoles una vista en el tribunal por una violación a la Ley 54 de violencia doméstica contra su expareja, lo que de acuerdo a su progenitora lo tenía deprimido.
La llegada de una expareja del joven hasta la playa provocó que los ánimos se caldearan entre ella y los familiares.
Por su parte el comisionado interino del Negociado para Manejo de Emergencias Nino Correa anunció esta tarde la suspension de la búsqueda del joven debido a las condiciones marítimas peligrosas que fueron empeorando a lo largo del día.
Al momento las condiciones del mar han hecho imposible que los buzos desciendan, ya que las corrientes los llevan hacia el oeste. Sin embargo debido a este factor, las autoridades han movido la búsqueda a diversos sectores de Arecibo.
A este operativo se unió personal de las Fuerzas Unidas de Rápida Acción, Manejo de Emergencias estatal y municipal y la Guardia Costera. Mientras ellos buscaban, la familia recibía el apoyo de capellanes, quienes les brindaron ayuda espiritual ante la desaparición por la desparición del joven, quien es padre de dos niños de 4 y 2 años.