En su mayor esplendor, la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) tuvo cerca de 600 trabajadores asignados a la tarea de desganche y poda de árboles, pero esa cifra había disminuido a cerca de 270 trabajadores cuando llegó LUMA Energy.
Hoy esa empresa subcontrata el servicio de poda de árboles y desganche a través de cuatro compañías.
Abdel Rodríguez Cosme es un residente de Puerto Nuevo en San Juan que espera que una de esas cuatro compañías ponga fin a la pesadilla que causa un árbol cuyas ramas ocasionalmente causan cortocircuitos y explosiones en el poste que le da servicio a su sector.
Han pasado los años, salió la AEE, llegó LUMA y la espera continúa, así como otros tantos abonados en situaciones similares. En el caso de la familia Rodríguez Carrillo, la espera y el peligro convierten su patio en zona de peligro.
Pero la crisis que atraviesa el sistema eléctrico no se limita a ramas de árboles que arropan los postes y líneas eléctricas, también se nota en el deterioro de miles de postes de madera, como ocurre en la calle Paganini de Río Piedras. Al exponer su frustración con la situación, estos ciudadanos reconocieron que esperaban un mejor desempeño de la empresa LUMA que hoy administra la distribución y transmisión del sistema eléctrico.
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