El sorteo de esta noche de Powerball aumentó a $550 millones, convirtiéndose en el noveno premio más alto en su historia, informó la secretaria auxiliar de las Loterías de Puerto Rico del Departamento de Hacienda, Lorna Huertas.
“Exhorto a la ciudadanía a participar en este millonario sorteo y ver la posibilidad de que haya otro ganador en Puerto Rico. Para nosotros en Lotería Electrónica, es vital promover la participación de nuestro mercado en un sorteo millonario como este, porque somos la única jurisdicción latina en formar parte de Powerball. Además de generar cientos de ganadores en la Isla tras cada sorteo, es una ventana de recaudo que nos permite aportar al desarrollo económico y social de Puerto Rico”, puntualizó la Secretaria Auxiliar de las Loterías.
Por su parte, la directora auxiliar de la Lotería Electrónica, Karen Soto, destacó que la venta de jugadas de Powerball genera localmente cerca de $4.4 millones al año en ganancias por comisión entre comerciantes autorizados a vender Lotería Electrónica. “Tanto Powerball como los demás productos que ofrecemos, generan no solo una comisión por venta al comerciante local, sino tráfico de clientes a sus negocios especialmente cuando aumenta el jackpot a los niveles que estamos viendo estas primeras semanas del año. Por eso es tan importante apoyar al comercio local haciendo sus jugadas de Lotería Electrónica”, señaló Soto.
Las funcionarias comentaron que el sorteo de esta noche también es especial pues la fecha - miércoles, 13 de enero- representa el quinto aniversario del premio más alto de Powerball que fue de $1.586 miles de millones, ganado precisamente el 13 de enero de 2016.
“De haber un ganador del premio de $550 millones en Puerto Rico, lo esperamos mañana mismo en nuestras oficinas para pagarle su premio. Este puede ser cobrado en un solo pago, o en anualidades de 30 años con pagos que fluctúan entre $8 y $30 millones”, añadió Soto.
Puerto Rico ya cuenta con varios ganadores de Powerball, uno de ellos en febrero de 2015 que se vendió en Ponce Shell de Coto Laurel. Este premio de $564.1 fue dividido con otros dos ganadores de Carolina del Norte y Texas y fue el primer premio de Powerball vendido fuera del territorio continental de Estados Unidos. El otro premio que cayó en la Isla fue de $50 millones en abril de ese mismo año y se vendió en Sabana Grande.
