Una mezcla de emociones es lo que reina entre los rescatistas que estuvieron destacados dos días y medio en la playa Poza del Obispo en Arecibo en búsqueda del joven Harold Carrión Butters, y a quien las autoridades encontraron con vida y en buen estado de salud en una estructura a solo millas del lugar donde según familiares fue arrastrado por el mar.
En total fueron 35 los trabajadores que participaron de la búsqueda, quienes fueron desplazados por aire, tierra y mar, donde lograron conseguir una camisa y una toalla.
Un caso que desde el principio causó suspicacia entre las autoridades, por lo que se unieron a las voces que exigen a la legislatura que le dé paso al proyecto que implementaría mayores sanciones contra quienes activen un operativo de búsqueda utilizando un falso testimonio y pongan en riesgo la vida de los rescatistas.
Entre este grupo de profesionales, hay padres de familia quienes tras la llamada al 9-1-1, son los que salen a rescatar a través de toda la isla, sin importar las condiciones del tiempo, por lo que piden prudencia a la ciudadanía.