El exgobernador Ricardo Rosselló Nevares reaccionó hoy, martes, luego que el Panel sobre el Fiscal Especial Independiente (PFEI) publicara el informe sobre su investigación que conluyó que no se presentaran cargos por el famoso chat de Telegram que le costó la renuncia.
“En primer lugar, quiero agradecer a mi esposa, Beatriz, por ser un pilar de fuerza y amor. También quiero agradecer a mis hijos, a toda mi familia y a todos mis amigos y simpatizantes por su inquebrantable creencia y amor durante este largo tiempo y arduo proceso”, dijo Rosselló Nevares en declaraciones.
El PFEI anunció hoy que "los fiscales especiales indpendientes Miguel Colón Ortiz y Leticia Pabón Ortiz no pudieron encontrar el quantum de prueba, ni la intención criminal o negligencia requerida para sostener acusaciones penales contra los integrantes del Chat de Telegram" en una comunicación escrita. El ente si refirió a Elías Sánchez a la Oficina del Procurador General ante posibles violaciones éticas por su intervención en un "asunto gubernamental" y el resultado de la investigación a la Oficina de Ética Gubernamental.
“Como he dicho todo el tiempo, este lamentable tema fue utilizado por mis oponentes políticos para distraer la atención de las importantes reformas que estábamos logrando en nombre del pueblo de Puerto Rico, entre ellas eliminar la cultura de la corrupción. Lamento que como consecuencia de este asunto mi administración se haya visto frustrada en un sincero deseo de servir fielmente al pueblo de Puerto Rico”, expresó Rossell.
“Enfrentando desafíos fiscales sin precedentes, decadencia económica, estancamiento social, colapso de la estructura del gobierno, una Junta de Supervisión Fiscal impuesta y el impacto de dos tormentas devastadoras en el transcurso de dos semanas, hicimos mucho para abordar la corrupción, la ineficiencia y la complacencia que plagaron nuestro gobierno por años. Nuestros logros en la racionalización del gobierno, la reforma de los sectores de energía, salud y educación, la reducción de las tasas de criminalidad, el crecimiento de la economía y el avance de los derechos de las mujeres, los pobres, las comunidades religiosas y las comunidades LGBTQ pusieron a Puerto Rico en un lugar mejor. Si bien aún quedan muchos desafíos por delante, confío en un futuro más esperanzador, y ese futuro incluye la estadidad de Puerto Rico”, concluyó.