Los residentes del barrio Limones, en Yabucoa, que se vieron en octubre por el colapso del puente de acceso a su comunidad permanecen hoy a merced de que el gobierno municipal y estatal les de la gana de cumplir con la promesa de un acceso provisional.
A los residentes del sector Campo Alegre se les dijo que el puente estaría en dos semanas, pero la espera se ha hecho más larga.
La demora y poca comunicación del estado de los trabajos causó que salieran hoy a la calle en busca de respuestas.
Uno de los vecinos molestos Ángel Morales precisó que la tardanza de la construcción inició cuando las labores de demolición del puente colapsado se tardaron y no fluyeron como debían. Esto continuó cuando la maquinaria que el municipio contrató se ha averiado, por lo que los trabajos se detienen a menudo.