El Programa de Enfermedad Renal Crónica o CKD, por sus siglas en inglés, tienen unas ocho clínicas en la isla que ofrecen servicios a los pacientes renales, con un cuidado multidisciplinario para, de forma preventiva, evitar que su condición progrese y terminen en diálisis o, peor aún, en un transplante de riñón.
Según la administradora del proyecto CKD, Tatiana Vélez, “la manera preventiva es manejando las condiciones crónicas como la diabetes y la hipertensión” o si ya el paciente está en los estadíos primarios de la condición del riñón, se trata de evitar el progreso para que no llegue a necesitar diálisis.
Sin embargo, las estadísticas indican que Puerto Rico está entre los primeros diez países con mayor incidencia y prevalencia de pacientes en diálisis. Dos terceras partes de estos pacientes que se dialisan son diabéticos, aunque hay otras causas de las enfermedades renales, como las condiciones hereditarias o autoinmune, quistes en los riñones, o el abuso de antiinflamatorios, según el Dr. Christopher Borrero.
A pesar de esto, existen nuevos medicamentos para la hipertensión que protegen el corazón y el riñón. Para información, puede llamar al 787-710-2532.