A diferencia del pasado, hoy día las imágenes de los ataques, destrucción, muerte, desolación entre Rusia y Ucrania se tienen a la mano en cuestión de minutos. Porque las redes sociales se han encargado de mostrarlas. Así que por más lejos que parezca, afecta el estado emocional más aún cuando en los últimos dos años se ha vivido una pandemia.
Los datos de las investigaciones indican que la incertidumbre que trae un conflicto como este puede llevar a padecer de un estrés agudo causado por el dolor de lo que se pierde en situaciones de emergencia.
También puede haber esquizofrenia, estrés postraumático y bipolaridad. Se dice que en circunstancias normales una de cada catorce personas pueden sufrir de ello, en una guerra ese número es uno de cada tres.
Otro asunto es que las guerras traen pobreza y ello tiene fuertes vínculos con las enfermedades mentales.